El circo de Falcón y la oposición
Se deben despedazar en los papeles públicos a los ladrones del Estado
Simón Bolívar
Simón Bolívar
Definitivamente la democracia venezolana es un verdadero circo o para quitarle al presidente Chávez lo que él dice de otros, estos es un show donde payasos, estúpidos y magos se apoderaron del petróleo, para hacer de la política un modo de vida, evacuar resentimientos sociales y la muestra más patética es el chavismo comenzado por el "jefe", un militarcito frustrado, cobarde, ambicioso si de ser alguien y para quien la corrupción es el medio para mantenerse en el poder y la corrupción en Venezuela entretiene a una parte importante del país, no porque él quiera robar sino porque él ve que sus líderes roban, visten bien, viajan, usan vehículos importados, joyas y consumen bebidas de 50 años preguntándose a lo mejor: ¿si ellos pueden porque yo no? Esa es la verdad de la sociedad democrática venezolana del primer Rafael Caldera hasta hoy; por supuesto de la conquista española nos vino la mala costumbre estigmatizada siempre en los jefes y siempre militares, la clase más corrompida que ha tenido Venezuela.
De allí que el planteamiento de la tragedia a que nos conduce Hugo Chávez Frías, no es su autoritarismo, corrupción, ni la pérdida de la libertad que es el don más preciado, sino sacarlo a él, para robar otros. Esta realidad no les gusta a muchos dirigentes y muy concretamente en Lara se me cuestiona esta apreciación nuestra que, cuando fui militante de Acción Democrática se calificaba como de "echarle a perder los negocitos a los compañeritos" y ahora que debilito a la oposición. Afortunadamente no se me expulsó del partido que fundara Rómulo Betancourt, sino que me fui precisamente cuando su dirección política pactó con Hugo Chávez Frías para proteger a los corruptos que no le dan ni medio al viejo partido del "pueblo", lo que me permite hacer de mis principios políticos, fundamentados en el pensamiento de Rómulo Betancourt entre otros una divisa al menos, para morir tranquilo y como tal seguirá este Picapedrero y hasta que EL IMPULSO lo permita, diciendo mis verdades como ésta, del circo y sus payasos, estúpidos y magos que se arrebatan a Venezuela.
En ese circo, el ciudadano Henry Falcón se ha convertido en Lara en el showman, haciéndose mostrar como un gran gerente político, porque le regaló la vieja avenida comercial a los buhoneros y le embelleció a los herederos de algunas herencias la parte este de la ciudad, regaló terrenos en la misma zona, ha complacido a comerciantes, grandes y pequeños empresarios, se hizo ingeniero de la construcción, amigos de banqueros de Globovisión, es leal a Luis Miquilena, hasta culipandear ante la renuncia de Hugo Chávez Frías aquel 11 de abril, juegos de acróbatas que no perdona precisamente Chávez, quien no se conforma con perdones -yo amo a Chávez, soy chavista, quiero a Chávez- sino con lealtades que para Falcón es "lahi". En esa onda, pretende ser gobernador del estado Lara y ha jurado no ser candidato sino del "pus", donde gracias a la experiencia de Jorge Rodríguez en el Consejo Nacional Electoral, perderá la nominación y será entonces el candidato de la oposición chavista y de la agradecida oposición colaboracionista de Barquisimeto para asegurar biyuyos. La acrobacia de Henry Falcón es tan estúpida que en la calle se nos pregunta: ¿qué prefieres tú, al tatareto de Fernández Medina? Es decir, habría que escoger no entre el más honesto, eficiente, capaz, sino en el que le garantice a la clase política más posibilidades de obtener beneficios, porque lamentablemente poco les importa el país a ciertos ciudadanos que piensan al igual que Benito Mussolini, cuando decía: "Nosotros nos permitimos el lujo de ser aristocráticos y democráticos, conservadores y progresistas, reaccionarios y revolucionarios, legalistas e ilegalitas según las circunstancias del tiempo, de lugar y de ambiente en las que nos veamos obligados a vivir y obrar".
Ciudadana y ciudadano, vamos a buscar una persona decente para que gobierne en Lara con responsabilidad, se enfrente al presidente Chávez, para que Yacambú sea una realidad "cierta", la policía sea depurada para asegurar una seguridad pública "posible", distribuir los recursos con carácter prioritario, atender los hospitales, ambulatorios y reivindicar las medicaturas, exigir a los funcionarios públicos sólo el cumplimiento del deber y no la persecución política, la camisa y gorra roja, asuntos que parecieran sencillo, pero que no lo son cuando no hay colaboración ciudadana espontánea y en esa búsqueda no podemos escoger como gobernantes a corruptos, incapaces y resentidos y tienen la palabra cuanto generen opinión, porque el chavismo es derrotable democráticamente, ellos tienen armas, terror y quieren muerte, los contrarios queremos vida y tenemos los votos, pero no podemos endosárselos a los chavistas encubiertos ¡actuemos!
Jorge Ramos GuerraDe allí que el planteamiento de la tragedia a que nos conduce Hugo Chávez Frías, no es su autoritarismo, corrupción, ni la pérdida de la libertad que es el don más preciado, sino sacarlo a él, para robar otros. Esta realidad no les gusta a muchos dirigentes y muy concretamente en Lara se me cuestiona esta apreciación nuestra que, cuando fui militante de Acción Democrática se calificaba como de "echarle a perder los negocitos a los compañeritos" y ahora que debilito a la oposición. Afortunadamente no se me expulsó del partido que fundara Rómulo Betancourt, sino que me fui precisamente cuando su dirección política pactó con Hugo Chávez Frías para proteger a los corruptos que no le dan ni medio al viejo partido del "pueblo", lo que me permite hacer de mis principios políticos, fundamentados en el pensamiento de Rómulo Betancourt entre otros una divisa al menos, para morir tranquilo y como tal seguirá este Picapedrero y hasta que EL IMPULSO lo permita, diciendo mis verdades como ésta, del circo y sus payasos, estúpidos y magos que se arrebatan a Venezuela.
En ese circo, el ciudadano Henry Falcón se ha convertido en Lara en el showman, haciéndose mostrar como un gran gerente político, porque le regaló la vieja avenida comercial a los buhoneros y le embelleció a los herederos de algunas herencias la parte este de la ciudad, regaló terrenos en la misma zona, ha complacido a comerciantes, grandes y pequeños empresarios, se hizo ingeniero de la construcción, amigos de banqueros de Globovisión, es leal a Luis Miquilena, hasta culipandear ante la renuncia de Hugo Chávez Frías aquel 11 de abril, juegos de acróbatas que no perdona precisamente Chávez, quien no se conforma con perdones -yo amo a Chávez, soy chavista, quiero a Chávez- sino con lealtades que para Falcón es "lahi". En esa onda, pretende ser gobernador del estado Lara y ha jurado no ser candidato sino del "pus", donde gracias a la experiencia de Jorge Rodríguez en el Consejo Nacional Electoral, perderá la nominación y será entonces el candidato de la oposición chavista y de la agradecida oposición colaboracionista de Barquisimeto para asegurar biyuyos. La acrobacia de Henry Falcón es tan estúpida que en la calle se nos pregunta: ¿qué prefieres tú, al tatareto de Fernández Medina? Es decir, habría que escoger no entre el más honesto, eficiente, capaz, sino en el que le garantice a la clase política más posibilidades de obtener beneficios, porque lamentablemente poco les importa el país a ciertos ciudadanos que piensan al igual que Benito Mussolini, cuando decía: "Nosotros nos permitimos el lujo de ser aristocráticos y democráticos, conservadores y progresistas, reaccionarios y revolucionarios, legalistas e ilegalitas según las circunstancias del tiempo, de lugar y de ambiente en las que nos veamos obligados a vivir y obrar".
Ciudadana y ciudadano, vamos a buscar una persona decente para que gobierne en Lara con responsabilidad, se enfrente al presidente Chávez, para que Yacambú sea una realidad "cierta", la policía sea depurada para asegurar una seguridad pública "posible", distribuir los recursos con carácter prioritario, atender los hospitales, ambulatorios y reivindicar las medicaturas, exigir a los funcionarios públicos sólo el cumplimiento del deber y no la persecución política, la camisa y gorra roja, asuntos que parecieran sencillo, pero que no lo son cuando no hay colaboración ciudadana espontánea y en esa búsqueda no podemos escoger como gobernantes a corruptos, incapaces y resentidos y tienen la palabra cuanto generen opinión, porque el chavismo es derrotable democráticamente, ellos tienen armas, terror y quieren muerte, los contrarios queremos vida y tenemos los votos, pero no podemos endosárselos a los chavistas encubiertos ¡actuemos!
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