martes, 31 de julio de 2007

Las Locuras de Chávez y sus psiquiatras

Picapedrero

Las Locuras de Chávez
y sus psiquiatras

El primer psiquiatra que conocí, fue el doctor José Antonio Despujol, compadre de mi padre y con los años otros tantos, siempre interesado en encontrar algo que me enseñara sobre tan interesante actividad. Más fue, de parte de mi compañero de generación Francisco Tirado, a quien le escuche decir que: "la locura es un placer que solo conocen los locos", aceptándolo como valido y no menos impactante fue la casi recomendación de que, … cada quien debe tener una dosis de locura, que de ser necesaria o no, sin duda me remitió a las proezas de tanto hacedor de la humanidad para bien o mal.

Al respecto, me atrevería entonces sostener, que es alta, la dosis que llevamos por dentro del "lóbulo límbico" los venezolanos, no solo por parte de los conquistadores que debieron de haber estado de remate, para aventurarse a seguir a Cristóbal Colón y luego alistarse, al más cuerdo de nuestros compatriotas: El Libertador, dejándonos posteriormente, en medio de una gran loquería, desatada después de la Independencia. ¡Ah muerto el loquero mayor! se dijo así mismo Laureano Vallenilla Lanz, al enterarse de la muerte de su "gendarme necesario" Juan Vicente Gómez, para que tuviera que pedir "calma y cordura" el cuerdo del general Eleazar López Contreras y no por casualidad la segunda presidencia de Carlos Andrés Pérez tuvo como estribillo… ven locoven. De allí en adelante pareciera existir un maleficio que nos castiga al perder el juicio, apareciendo cualquier loco empeñado en solucionarnos el mal que nos aqueja.

Ahora, recordando que San Agustín dijo que: "Todos nacemos locos. Algunos continúan así siempre" es de esperar que de esa antigua premisa, el trabajo de los psiquiatras es digno y arduo, porque está bien que nazcamos ¿pero que permanezcamos? es para coger palco, como se decía antes. Basta con observar el desarrollo de esa locura que llamamos amor, para tener una idea de lo delicado del asunto por sus consecuencias y peor lo es, cuando se trate del poder y esa mexcla de pasión y ambición donde se es capaz de insólitas locuras, justificándose entonces el análisis desprejuiciado de los psiquiatras, ya no, con el sentido histórico-biográfico de los hombre y mujeres de poder, sino en oportuno momento, digamos de prevención. ¿Acaso no tiene sentido que los pilotos de aeronaves, sean sometido periódicamente a exámenes psiquiátricos? con más razón los que pilotean la nave de la nación.

En ese sentido llama la atención, el comunicado del gobierno venezolano a los profesionales de la salud mental de fecha julio 25 de 2007, donde luego de unos considerando acerca de las opiniones de algunos "colegas del campo de la psiquiatría" --a quienes los consideran--…"dando opiniones personales sobre interpretaciones no técnicas ni ética sobre las personalidades del acontecer nacional e internacional alejados de toda lógica terapéutica y de relación humana"… En otro aparte del comunicado se les amenaza con sanciones y peor aún: "De igual manera, responsabilizamos a los medios de comunicaciones, impresos, radiales y televisivos que conociendo o no las leyes de la República Bolivariana de Venezuela, faciliten el uso y abuso del irrespeto de la Majestad del Estado y de nuestro Presidente"

¿A qué se debe tan grosero e intimidante comunicado? Sin duda, a las opiniones de distinguidos psiquiatras en relación al perfil o personalidad psiquiátrica del presidente Hugo Chávez Frías, que a pesar de no ser solicitada por el mismo, por cuanto si estaríamos en franca violación al secreto profesional que al respecto se debe tener, más no es delito el opinar profesionalmente acerca de los personajes públicos y menos hacer comparaciones con sentido histórico o de advertencia sobre el liderazgo político del país, porque si de algo debemos saber los venezolanos, es de la salud de quienes nos gobiernan en atención de que, el político no tiene vida privada -- ese es el costo para el ejercicio del poder-- además por aquello que decía el Cesar al referirse a su mujer, que no solo debería ser honesta sino parecerlo.

Hoy, Los psiquiatras chavistas piden respeto para el presidente, con lo cual habría que preguntarles ¿Qué entienden por irrespeto? ¿Y cuando el irrespeta? Porque pareciere que el presidente Chávez tuviese patente de corso para insultar y el ciudadano común o colectivo dejarse insultar. ¡Allá los magistrados que se dejaron decir plastas el Secretario General de OEA pendejo y el presidente del Perú ladrón de siete suelas¡ ¿Pero más irrespeto a los ciudadanos y locura también, no puede ser la nazista "Lista Tascón"? ¿Y quién no para en loco en este país, escuchando obligatoriamente a Chávez Frías, vestido de rojo rojito para que no lo despidan del trabajo, verlo regalar el dinero a manos llenas de los venezolanos, mientras no hay empleo, vivienda, gas y menos se consigan las caraotas, el pollo y harina pan, para hacerse líder de la América del Sur? ¡A cosa grande! como dice el doctor Henry Suarez Torres, todo enmarcado en el más inaceptable irrespeto y violatorio de elementales Derechos Humanos. ¿Qué es eso para los psiquiatras de Chávez?

De manera que, el comunicado emanado de los psiquiatras chavistas, pareciera ser extraído de las oficinas de la SS de Hitler, la KGB de Stalin o mejor dicho del G2 cubano que imparte líneas de censura en Venezuela por orden de Fidel Castro, definitivamente no nos las vamos a calar los cuerdos.

Jorge Ramos Guerra
ardive@gmail.com

miércoles, 18 de julio de 2007

La Etica en el Juez garzón y la Magistrada Morales

Picapedrero

La ética en el Juez Garzón
y la Magistrada Morales

(A mis estudiantes de Deontología Jurídica
en el 5º año de Derecho en la UFT)


A los fines de desmenuzar el sentido del título de este Picapedrero y su contenido, es obligatorio precisar que una cosa es la ética y otra la moral. Esta última es intrínseca de la persona, su formación, costumbres o modales, por lo cual se debe respetar. Lo ético sin duda, inseparable del otro, se corresponde con la conducta que se asume en la prestación de un servicio, para generalizar y me explico. La ética de un limpiador de zapatos, consiste en usar la crema requerida, no manchar el pantalón o las medias, lustrar bien y con una toalla presentable, luego limpiar sus cremas y mantenerlas en su cajón, así en lo sucesivo, para quien cocina, sepulta o expende hamburguesas o mondongo, donde no sería ético por ejemplo, devolver a la olla, un pedido que fue consumido a medias, entonces de allí a la ética de un profesional del derecho la diferencia es que, el mondonguero puede ser inculto el otro se presume culto y conocedor de obligadas normas éticas, así de sencillo.

La ética por tanto es de orden público y de alcance y exigencia universal a extremos que este siglo XXI, bien pudiera ser el siglo de la ética, porque la suerte de la humanidad está precisamente en la aplicación de conducta y normas éticas, en la responsabilidad de gobernar y de administrar la ciencia, la tecnología y el medio ambiente, como cuestiones fundamentales. En el arte de gobernar, fue el inglés John Locke, quien legara a la humanidad la separación de poderes, autónomos a su vez, como la fórmula política para que el poder Ejecutivo dictara las políticas públicas, el Legislativo las leyes necesarias y el Judicial para impartir justicia, en ese sentido luce oportuno discutir de ética jurídica o deontología jurídica en las personas del juez Baltasar Garzón y la magistrada presidenta del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, Estela Morales Lamuño, con motivo de una conferencia del primero, durante un acto en la Corporación que agrupa a los industriales venezolanos, referida a la visión que de la justicia tiene el juez español, sus experiencia y muy puntualmente lo relacionado con los Derechos Humanos, intervención esta, que molestó tanto a la magistrada Morales Lamuño que, lo menos inadecuado que se divulgó por los medios de comunicación fue llamarlo "mercenario".

¿Qué dijo el juez Garzón para que fuera calificado de mercenario por la presidenta del Tribunal Supremo de Justicia? ¡Aquí está el detalle! como dijera Cantinflas. Como se sabe, el abogado Baltasar Garzón, actuando como Juez de Instrucción de la Audiencia Nacional española, se dio a conocer al mundo, el 18 de octubre de 1998, al librar una orden de captura por delitos de terrorismo, genocidio y torturas en la persona del dictador chileno Augusto Pinochet, para el momento hospitalizado en una clínica londinense, a partir de entonces es una referencia como juez implacable con la violación de los derechos Humanos y entre otros delitos, los de corrupción. En ese sentido, ha dictado jurisprudencia que le acredita una "ética jurídica", reflejada en la conferencia in comento, al pronunciarse acerca de la transparencia de la justicia, entre cuyas frases tomamos algunas, a los fines de quien nos lee:

.."La justicia no se pide, se exige…los jueces somos servidores públicos, por ello el compromiso responsable con la sociedad es indiscutible e imprescindible…Los jueces no somos medidores de normas en una democracia ni acólitos, ni podemos ser acólitos serviles el poder del equipo de turno…Cuando los jueces o los sistemas judiciales son o están demasiado próximos al poder político, pueden la objetividad y el equilibrio que en mantener a la hora d administrar justicia"…

Lo anterior fue suficiente para que, la magistrada Estela Morales Lamuño declarara: "Estamos frente a un juez que vino como un mercenario, que vino a parcializarse con una posición que no le estaba dado" es decir, una persona que recibe una paga por hacer algo. ¿Ahora bien, cuál fue el algo y la paga? Si lo fue la conferencia, que es toda una pieza de ética jurídica ¿cómo pudieran calificarse a los magistrados que le corearon al presidente Hugo Chávez Frías él, ¡uh,uh, ah.Chávez no se va! a conciencia que antes, a esos los mimos magistrados les llamara ¡Plastas!? Vistas así las cosas ¿En qué balanza se puede pesar la ética del juez Garzón y la de los magistrados del máximo Tribunal de la República? Debe haber una repuesta y no insultos por aquel viejo dicho de que: …"el que se pica es porque ají come"

Y en verdad a nuestro juicio, hay dos razones de peso para la picada. La primera es que, el juez Baltasar Garzón viene conociendo del célebre millón y medio de dólares que recibiera el presidente Hugo Chávez Frías, por parte del Banco Provincial de Venezuela, filial del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA) al 7 de julio de 1999, que no haberlo declarado, constituye delito en España y Venezuela, investigación que incluye al ex presidente y hoy prófugo de la justicia peruana, Albero Fujimori y al delincuente de Vladimiro Montesino quien estuviera escondido y protegido por el gobierno de Hugo Chávez Frías y todo ese proceso no "prescribe" como no prescriben los delitos de "Lesa Humanidad "y violación de los Derechos Humanos, a tenor de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y a Tratado y Convenios suscritos por el gobierno, en los cuales tiene jurisdicción precisamente el juez Baltasar Garzón.

Una segunda razón es que, para el juez Garzón debe existir una "Justicia Universal" argumentando: "Si una conciencia jurídica legitima conlleva a un nivel de exigencia ética creciente, debemos concluir que ante la eventual pasividad de la justicia en un lugar concreto, la práctica de una justicia universal válida puede y debe eliminar toda sombra de impunidad allá donde se produzca y conseguir que su aplicación ennoblezca cava vez más la dignidad del ser humano"

Es en esos razonamiento donde nace el pánico de la magistrada Morales Lamuño de pensar que, el presidente Chávez Frías pueda ser imputado en tribunales internacionales por delitos que no "prescriben" y su actuación resultó como lo que es, una juez carente de ética nada más y nada menos que por haber sido destituida en dos ocasiones por: "grave error jurídico de carácter inexcusable" y "alteración de actas y otro concurso de infracciones tipificadas en la Ley Orgánica del Poder Judicial" en la última destitución se lee el nombre del honorable magistrado Elio Gómez Grillo, presidente de la Comisión de Funcionamiento y Reestructuración del Sistema Judicial ( a 30 días del mes de octubre de 2003) que hasta donde se sepa, no es abogado de la "Casa Blanca". Aún con todo ello, la ciudadana Estela Morales es la "Jefa" de la justicia en Venezuela. Entonces ¿y la Ética? ¿Para qué compatriota? ¡Esta es una robolución armada y sin valores éticos.

Ahora juzgue y compare Ud.

Jorge Ramos Guerra
ardive@gmail.com
30.06.